Los propietarios, que trabajan para una organización benéfica y una empresa de marketing, compraron esta propiedad independiente de cinco dormitorios de la década de 1920 en 2014. Un agente inmobiliario local mencionó que una casa que había pertenecido a la misma familia durante 40 años estaba a punto de salir al mercado, por lo que la pareja decidió echarle un vistazo. "Nos enamoramos del exterior y nos gustó que tuviera margen de mejora en el interior". Aunque el interior había sido bien cuidado, hacía mucho frío, debido a un antiguo sistema de calefacción y ventanas de un solo acristalamiento.
La pareja sintió que la casa era lo suficientemente grande como para que no tuvieran que ampliarla, pero había una multitud de habitaciones pequeñas y una distribución que se sentía muy desordenada. "Estábamos muy interesados en continuar con la renovación y remodelación, para que se sintiera más espacioso, además de actualizarlo".
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Empleando a un constructor recomendado por un amigo, se comenzó a trabajar para eliminar las paredes y crear un diseño de planta más abierta, durante el cual la familia se mudó a una caravana en el camino de entrada. Aunque la construcción fue bastante fluida, no estuvo libre de contratiempos y tardó casi seis meses en completarse con un invierno que pasó viviendo en un sitio de construcción y la amenaza de la Navidad en una caravana.